El uso del látigo en el sexo es ya un viejo conocido de los practicantes de BDSM. Sin embargo, tras la película «Cincuenta sombras de Grey», muchas personas ajenas a este universo comenzaron a interesarse por este accesorio, también conocido como fusta.
El deseo de salir de la rutina, de hacer cosas diferentes para condimentar la relación puede ser la excusa perfecta para introducir accesorios más atrevidos a la hora del sexo.
Y, si la idea de «matices de BDSM» atrae a la pareja, no hay nada malo en experimentar con los roles de dominante y sumiso. Y, por supuesto, para ponerlo en práctica, el látigo es un accesorio imprescindible.
Consejos para utilizar el látigo
Al principio, el látigo puede parecer incluso un accesorio bastante fuerte para empezar. Pero en realidad, lo que realmente importa es la intensidad con la que se aplicará. Todo dependerá de cada pareja. Lo importante es que estén de acuerdo y que sigan estos consejos:
- Aclarar la intensidad con la que se utilizará el látigo. Puede variar de ligero, moderado o más duro.
- Poner atención a las partes del cuerpo en las que se utilizará el látigo para no causar daños más graves.
- Establecer una palabra de seguridad para indicar que es el momento de parar, de esta manera, ambos disfrutarán sin sobrepasar los límites del otro.
- Es aconsejable que la pareja inicie los juegos sexuales como lo hace habitualmente, y luego ir incorporando el látigo como un elemento que generará más placer.
- Además de utilizar el látigo para dar azotes, se pueden utilizar las correas para acariciar el cuerpo de la pareja y estimular las zonas erógenas.
- Después de la sesión, se debe utilizar una crema calmante en la zona para asegurarse de que la piel está en perfecto estado.
- El uso del látigo durante el sexo puede alternarse con otras prácticas BDSM, como el bondage, que es la restricción física de los movimientos.
Todo ello puede contribuir a aumentar la excitación y las fantasías sexuales.
¿Y cuáles son los tipos de látigo para el BDSM?
Hay tres tipos. Cada uno con sus diferencias y ventajas.
Látigo para montar
Como su nombre indica, este tipo se asemeja al látigo utilizado en los caballos. Es más fácil controlar la intensidad del impacto.
Látigo de varias correas
Muy popular en la comunidad BDSM y también conocido como flogger. Es un látigo con muchas tiras que se puede utilizar en cualquier parte del cuerpo.
Las correas pueden ser de goma, cuero o incluso seda. Los modelos varían mucho, desde los más hardcores hasta los más light.
Látigo clásico
Se trata de un látigo de una sola correa que debe utilizarse con cuidado, ya que puede doler más que los otros si no se maneja correctamente.
Nunca olvidar que el uso del látigo en el sexo tiene que ser bueno para todos los implicados. Además, este tipo de prácticas sólo deben realizarse con personas de plena confianza. Si es así, ¡disfruta!
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